Una historia tan sosa como innecesaria

El último cartucho de FOX antes de que Disney recuperase los derechos de los X-Men ha llegado muy tardes. Estrenarse después de semejante noticia convierte automáticamente todo lo que tengas que decir en innecesario. ¿Realmente nos importa qué les pase a estos adolescentes mutante cuando no van a poder disfrutar de un desarrollo futuro? La respuesta es sencilla: NO.

Los Nuevos Mutantes tenían todo para triunfar, sobre todo gracias a casting plagado de caras muy reconocibles. Maisie Williams (Game of Thrones), Anya Taylor-Joy (Gambito de Dama) o Charlie Heaton (Stranger Things) son algunos de los jóvenes actores que se ponen al frente de este proyecto en el que la Dr. Reyes (Alice Braga) trata de buscar potenciales asesinos entre este grupo de adolescentes perdidos.

El limitado escenario frena cualquier posibilidad de avance, metafórico y literal pues el complejo en el que se encuentra está protegido por un campo de fuerza. Y el hecho de que el mayor conflicto sea el suyo interior, al tratar de entender sus poderes, hace que la película carezca de un villano claro sobre el que sustentar la historia. El miedo es al final el gran enemigo a batir, y se unen frente a él solucionando sus conflictos internos de manera muy un tanto apresurada.

Terminada la historia...¿ahora qué? Quizás estar disponible en Disney+ les ayude a llegar a un mayor público.