Emoción a raudales. Viola Davis se ha llevado el Premio Oscar a Mejor Actriz Secundaria por su arrebatador papel en 'Fences'. La actriz no ha podido contener las lágrimas durante todo el discurso y ha agradecido a la Academia y a sus más allegados haberse llevado por fin la estatuilla dorada a casa. No te pierdas su discurso traducido al español.
"Gracias a la Academia", ha comenzado agradeciendo sobre el escenario Davis. "Ya sabéis, sólo hay un lugar donde todas las personas con tanto talento se pueden reunir. Un lugar, y ese es el cementerio. La gente me pregunta todo el tiempo, ¿qué tipo de historias quieres contar, Viola? Y yo digo, exhumad esos cuerpos. Exhumad esas historias. Las historias de las personas que tuvieron grandes sueños y nunca vieron esos sueños hacerse realidad. La gente que se enamoró y perdió. Me convertí en artista - gracias a Dios que lo hice - porque somos la única profesión que celebra lo que significar vivir".
"Así que, aquí estoy por August Wilson, quien exhumó y honró a la gente común. Y por Bron Pictures, Paramount, Macro, Todd Black, Molly Allen por apoyar una película que va sobre la gente. Y las palabras. Y la vida, el perdón y la gracia", ha continuado la intérprete del largometraje dirigido por Denzel Washington, que adapta una obra de teatro a la gran pantalla. "También por Michael T. Williamson, Stephen McKinley Henderson, por ser los artistas más maravillosos con los que jamás he trabajado. (...) Y, oh, capitán, mi capitán, Denzel Washington", en una clara referencia a 'La sociedad de los poetas muertos' de Robin Williams.
Aprendiendo a amar
"Gracias por aunar a dos entidades a la cabeza: August y Dios, ellos os han servido bien. Y a Dan y Mary Alice Davis, que estuvieron y fueron el centro de mi universo, la gente que me enseñó lo bueno y lo malo, cómo fracasar, cómo amar, cómo agarrar un premio, cómo perder. A mis padres, estoy muy agradecida a Dios por elegiros para traerme al mundo. A mis hermanas, mi hermana Dolores, hemos sido mujeres blancas y ricas jugando a las fiestas de té. Gracias por la imaginación. A mi marido y mi hija. Mi corazón, tú y Genesis. Me habéis enseñado cada día cómo vivir, cómo amar, estoy muy orgullosa de que seais el sostén de mi vida. Gracias a la Academia. Gracias".
