Tres años después de su última aparición, los chicos de Hawkins regresan en la primera mitad de la quinta y última temporada de 'Stranger Things'. Aunque solo se han estrenado cuatro episodios -las dos partes restantes llegarán en diciembre y enero, respectivamente-, la crítica coincide en que el arranque que recompensa la larga espera, arrancando con un 86% de valoraciones positivas en Rotten Tomatoes.
Las primeras valoraciones destacan que el espíritu del fenómeno global sigue intacto: "Para una serie que ha estado desaparecida desde 2022, no ha perdido ni un poco de personalidad vibrante y espectáculo de terror", afirma Nick Schager (The Daily Beast). Laura Martin para la BBC sentencia: "Ningún fan se va ir decepcionado... el hype por el resto de la temporada está al máximo".
Varios críticos coinciden en que este inicio supone una mejora tras los desequilibrios de la cuarta temporada. Schager de nuevo asegura que: "sobre la base de estos primeros capítulos, ha recuperado parte de su estabilidad", mientras que Jack Seale (The Guardian) ofrece una mirada más irónica: "La serie definitivamente necesita apagar su radiocasete, colgar sus tirachinas y admitir que es demasiado mayor para estas gamberradas, pero vale la pena permitírselo una última vez".
Entre las secuencias más celebradas se incluye un emotivo diálogo. Liz Shannon Miller en Consequence apunta: "Son Robin y Will... un hermoso discurso de Robin sobre su identidad". Nick Hilton (Independent) destaca la capacidad del reparto para sostener incluso los momentos más irregulares: "hay suficiente carisma para devolverte a la escena". Para Kelly Lawler (USA Today), sigue brillando la relación entre Dustin y Steve: "el corazón de la serie y la más creíblemente compleja".
El despliegue técnico vuelve a ser un tema recurrente: "Los efectos visuales han subido de nivel otra vez... la producción es una locura", asegura Tessa Smith (Mama's Geeky). Schager describe un estilo lleno de "movimientos de cámara vertiginosos y montajes afilados y contundentes". Nick Hilton celebra que el diseño de producción demuestre que "no todas las series de Netflix tienen por qué verse terribles".
Baño de acción y terror
El tono más oscuro también se expresa en el horror explícito. Smith advierte: "Vemos más de cerca y durante más tiempo al Demogorgon y esa cosa es absolutamente aterradora". Quinn (Sydney Morning Herald) va más allá: "cuando atacan las garras no solo desgarran la carne, la perforan". Lawler confirma que "las escenas de lucha siguen siendo llenas de acción y de infarto", mientras la BBC describe que cuando hay acción es "'Stranger Things' en su mejor versión".
Entre las críticas negativas, Miller alerta de una mitología "excesivamente densa" y de clichés reiterados. En The Daily Beast se habla de una subtrama "para poner los ojos en blanco". Hilton acusa a la serie de "Marvelización". Y Herman (Variety) sostiene que, al no profundizar en los personajes, la producción queda estancada en "desarrollo detenido".
Sin embargo, pese a los reparos, el optimismo sobre lo que viene es generalizado. Laura Martin asegura: "Es emocionante... los espectadores están ante un final televisivo realmente memorable". En Independent se valora el carácter "admirablemente inmersivo" del mundo creado por los Duffer, mientras Smith promete "una aventura salvaje, escalofriante, trepidante y devastadoramente emotiva".