Saw de siempre , intentando explicar lo inexplicable...

Siguiendo con la esperada temática gore, no sorprende en este aspecto, ya que quien la vamos a ver, ya sabemos de antemano lo que nos van a ofrecer.

En esta última versión, el director intentó mostrar la angustia y la escenificación en primera persona, lo que llevaba al espectador, a mí , por ejemplo, a sentir mareo por el movimiento incesable de la imágen, hasta el punto de sentir náuseas... que no por las imágenes gore.

Guion muy mezclado con imágenes actuales con las del pasado. Salvo el protagonista, los actores mostraban poca credibilidad en las situaciones expuestas...Sin referirnos ya a que uno de ellos, tenía en el bolsillo- casualmente- un tubito, para practicarse una traqueotomia de urgencia.... el colmo !