De la Iglesia, mejor por encargo

La filmografía de Álex de la Iglesia es bastante irregular en sus resultados, pero desafortunadamente demasiado regular en todo lo demás: el casting con sus múltiples actores fetiche y esos guiones/tramas que siempre empiezan a degenerar como sólo él sabe. Son tal vez aquellos trabajos en los que está más contenido que mejor acaban saliéndole y, 'Perfectos desconocidos' es el mejor ejemplo de ello.

Un encargo de Paolo Vasile, fascinado con el filme original italiano, y con un elenco que no suelen ser los habituales de De la Iglesia. Y, aunque en algún momento (sobre todo al final) da síntomas de descarrilamiento, el hecho de que tenga tantas directrices hace que el resultado sea notable.

No es la película del siglo, pero desde luego sí consigue articular a un reducido grupo de actores con química y una trama que va in crescendo y deja ganas de más. Personalmente, creo que el desenlace es lo menos logrado, pero afortunadamente es una de esas cintas en la que el peso está en el viaje y en la que el desenlace carece de importancia.