Casi 40 años lleva ya Alexandre Desplat acompañando las aventuras más increíbles y las historias más románticas, aterradoras, conmovedoras o irracionales con su música. 40 años transformando en sonidos las imágenes de cineastas como Jacques Audiard, David Fincher, Wes Anderson, Guillermo del Toro o Greta Gerwig. Y 40 años después todavía le quedan retos a los que enfrentarse, en concreto a los dinosaurios mutantes de 'Jurassic World: El renacer' y a la alargada sombra de otro maestro, John Williams, y la icónica melodía que creó en 1993 para 'Parque Jurásico'.
"A veces intento recordarle subliminalmente al público cosas que quizá no sean exactamente lo que conocemos de la banda sonora de John Williams, pero que nos recuerda a ella", nos explica Desplat, "Habrá momentos en la película en los que rendiremos homenaje a la banda sonora de John Williams. Un par de momentos. Pero se trata más del peso de su herencia, que es, ya sabes, difícil al principio. Hay un momento de pánico [cuando te enfrentas a seguir sus pasos] porque sabes que te estás apoderando de su trabajo. Como cuando hice las dos últimas películas de 'Harry Potter' me llevó unas semanas decidir qué iba a escribir. ¿Cómo puedo salir de ahí? Porque, sí, es un genio y es difícil ir después de él".
Universal Pictures nos invitó a volar a Londres el pasado marzo para vivir una experiencia única: ver trabajar a Desplat en vivo mientras se grababa una de las sesiones de la BSO de 'Jurassic World: El renacer' en los legendarios estudios Abbey Road, los mismos en los que se capturaron las bandas sonoras de 'Indiana Jones en Busca del Arca Perdida', 'La amenaza fantasma' o 'El Señor de los anillos: La comunidad del anillo' y también donde grababan The Beatles o por donde han pasado desde a Ella Fitzgerald, Little Richard o The Hollies a Pink Floyd, Deep Purple, Amy Winehouse y Lady Gaga.
Ante más de 100 músicos, Desplat dirige milimétricamente cada instrumento con una precisión, una claridad y un respeto hacía el trabajo de los demás que emociona. "Tenemos suerte de tener un grupo tan bueno de músicos. Porque sin ellos, no hay música", nos dice el compositor, "Puedo escribirla, puedo escribir tantas notas como quiera, que si no la tocan bien, no hay música". Estarán una semana grabando todo lo que ha compuesto, "unos tres minutos al día de música útil":
"Me gusta ir rápido por varias razones. La primera es el presupuesto. Seguro que a los productores les alegrará saberlo. Y segundo, los músicos. Ya sabes, ya es bastante difícil cuando hacemos estas sesiones, donde a veces tenemos que separar los metales de las cuerdas por razones técnicas, y son días largos días y largos momentos de espera. A los músicos les gusta tocar. Les gusta tocar música. No les gusta esperar, tienen que estar con su instrumento y expresarse. Así que, siempre que puedo, voy rápido para mantener la energía, el impulso y el deseo de descubrir las notas y sumergirme en la música".
A la prensa nos sientan en un balcón desde donde vemos la orquesta completa y a Desplat dirigiendo para que admiremos donde "ocurre la magia". Llega Jonathan Bailey y se sienta con nosotros, le han dicho que hoy se va a grabar el tema principal de la película y está deseando escucharlo. Bailey está en la ciudad interpretando 'Richard II' en el Bridge Theatre de Londres, pero se escapa para poder escuchar cómo sonará la película que va a estrenar este verano. Por desgracia el cine es un proceso lento y Desplat trabaja con una minuciosidad tal que el actor tiene que irse antes de que lleguen a esa parte, alguien le consigue una copia de las partituras y Bailey está claramente entusiasmado.

¿Pero por qué tanto interés con escuchar ese fragmento de la banda sonora?, ¿qué importancia tiene un tema recurrente para una película? ¿Qué hace que una banda sonora sea buena? "Siempre intento encontrar el equilibrio entre la función y la ficción", dice Desplat, "Función, que significa ser eficiente y, en este tipo de películas de género, poder destacar lo importante: la emoción, todos los peligros. Esa es la función. Y luego está la ficción, que se trata de cuánto puedes inventar y cuánta imaginación puedes aportar a esa función. Es difícil en este tipo de películas, es muy difícil porque no solo está el legado de John Williams, sino que hay muchos momentos de acción donde introducir temas no es fácil".
"Con Gareth [Edwards], hemos intentado crear algunos temas aquí y allá para la parte de la familia, para la expedición, para el T-Rex... pero no se pueden usar leitmotivs como en la ópera wagneriana o como en 'Star Wars', donde los personajes son tan importantes que la película está impulsada por ellos.Aquí lo que conduce la película es la acción. A los personajes se los come la acción. Y de hecho algunos mueren pronto, si les compusiese una canción a nadie le importaría porque el tema desaparecería al mismo tiempo que ellos y sería un desperdicio. Es algo que te planteas con este tipo de películas, no puedes repetir una melodía porque no funcionaría, así que intentas encontrar momentos donde puedas añadir solo un poco de ese leitmotiv".

Además de sentarnos en el balcón, a la prensa nos invitan a la sala de control y desde allí vemos algunas escenas todavía inacabadas, con los efectos especiales a medias, pero que sirven a Desplat y su equipo para musicalizar la película. Cientos y cientos de botones, tres personas manejando los mandos y comunicándose con el compositor y otro puñado de personas grabando las pistas o, aparentemente, simplemente observando. Está allí presente Gareth Edwards, que en realidad no tiene nada que hacer en esta parte del proceso, pero quiere saber cómo suena realmente 'Jurassic World: El renacer' después de haber escuchado una y otra vez unas maquetas de la BSO sintetizadas y muy simplificadas en comparación con todos los matices que aporta una orquesta completa:
"Es glorioso sentarme aquí hoy y escuchar todos los motivos y todas las melodías que, en cierto modo, nunca se llegan a percibir en esas demos", nos cuenta Edwards, "Realmente eleva la película. Uno sueña con llegar a este final donde todos han trabajado muy duro para hacerlo lo mejor posible y luego le entregas la dirección a otro, básicamente estás en manos del compositor para poner la guinda del pastel. Y Alexander está realmente entregando. Así que como no podría ser de otra manera, todo el mundo tienen una sonrisa enorme en la cara".
Aunque no podemos revelar nada de lo que allí vemos de la película, sí tenemos permiso para mencionar ciertas reminiscencias al trabajo de Steven Spielberg: "Recuerdo que cuando trabajé con Alexander en 'Godzilla' hablamos de las cosas que nos llevaron a este negocio. Para mí, obviamente, fue Steven Spielberg. Para Alexander, fue John Williams", recuerda el director, "Así que ambos teníamos una gran sombra sobre nosotros con esta película y sentíamos la presión de siquiera acercarnos a sus increíbles logros".
"Lo que Colin Trevorrow y Michael Giacchino consiguieron con la trilogía de 'Jurassic World', esa energía, es muy difícil de conseguir, por eso no podíamos compararnos con ellos. Esto es como un nuevo capítulo que a la vez se remonta más al material original. Steven [Spielberg] y David Koepp no es que escribieran el guion, pero sí crearon la historia juntos y cuando lo leí sentí que definitivamente me recordaba a la primera película".
Y por todo esto, y porque sería rarísimo ir a ver una película de 'Parque Jurásico' y no escuchar esa melodía que probablemente ahora estés tarareando en tu cabeza, sí, en 'El renacer' también está presente: "Hay momentos estratégicos en los que quisimos traer ese tema original que no puedes parar de cantar en la ducha", dice Edwards, "Ambos sentíamos que si íbamos al cine, habría momentos en los que sería la guinda del pastel".

¿Cómo describiría Desplat lo que nos espera en 'Jurassic World: El renacer'? "Es una película con muchas secuencias de peligro, muerte, escape y de ser perseguido por bestias enormes. [...] Cuando trabajas en la partitura y hablas con el director sobre cómo usar la música, a veces es bueno también alejarse un poco de lo que ves en la pantalla. En estos grandes momentos de miedo y ataques, tienes que interpretar el miedo y eso es todo, pero en otros puedes desviarte un poco de lo esperado. También hay momentos en los que el público necesita sentir tranquilidad, calma e intimidad entre los personajes. Y supongo que es ahí cuando se percibe más la naturaleza y cómo se sabe cuándo entran en el bosque o en la jungla. En la primera parte de la película la naturaleza está muy presente y la música contribuye a ese vínculo entre el público y la naturaleza que vemos en pantalla".
La IA no puede crear
En un mundo donde lo real y las imágenes generadas por ordenador son cada vez más difíciles de distinguir, donde ChatGPT nos vale de psicólogo y en el que Hollywood entero se paralizó porque los guionistas pedían un control regulado de lo que podía escribirse con una inteligencia artificial (y que a Paul Schrader le encanta), Desplat no tiene miedo a ser sustituido por una IA, pero sí le preocupan las nuevas generaciones:
"Solo espero que directores y productores sigan queriendo que los compositores trabajen e inventen algo nuevo y no solo repetir lo que la IA puede regurgitar. ¿Pero miedo? No, podría tener miedo si estuviera empezando mi carrera, sí, pero yo no tengo miedo. No porque crea que yo voy a poder seguir, pero porque he hecho ya muchas películas en las últimas décadas y, durante 20 años, he trabajado en Hollywood con muchos grandes directores. Así que he hecho lo que tenía que hacer en el momento en que podía hacerlo. Pero si esto cambia, son malas noticias para la próxima generación de compositores".
Lo que Desplat pone a sus partituras va más allá de juntar notas y lo que hace frente a nosotros con sus 105 músicos va más allá de dirigir, está creando un arte, una melodía que genera emociones con los ojos cerrados, sin necesidad de imágenes, pero que junto a estas dan forma al cine, al menos al cine que las personas oyentes conocemos: "Se necesita talento para crear algo especial", termina el compositor, "No estoy seguro de que una IA sea capaz de crear".
Y algo más tiene él que no podría tener un robot: responsabilidad y humildad. "A veces no acepto un trabajo porque no sé qué puedo hacer. No tengo ni idea de cómo puedo ayudar a la película con mis partituras. Pero una vez que empiezas a trabajar en la partitura, como le pasa a cualquier artista supongo, pintor o escritor... tienes que mirar dentro de ti, analizar tus fortalezas y encontrar qué camino vas a tomar y cómo llegarás al final del proyecto y qué pueden sacar a la luz que tal vez no hayan sacado antes, qué ideas no han experimentado o intentado... Es mucho trabajo".
'Jurassic World: El renacer' se estrena exclusivamente en cines el 2 de julio protagonizada por Scarlett Johansson, Bailey, Mahershala Ali y Rupert Friend y nos llevará por tierra, mar y aire hasta el lugar más peligroso de la Tierra: un centro de investigación del Parque Jurásico original ubicado en una isla donde habitan los peores de los peores dinosaurios...